FEBRERO 2024

lunes, 16 de junio de 2008

EXPATRIADO EN PAKISTAN



Por Darío Aparicio
Director Industrial de Nestlé Pakistán


Cuando en Enero del 2007 recibí un llamado telefónico desde París para ofrecerme una posición de Director Industrial en Pakistán, no dudé un segundo en aceptar la entrevista. Me interesaba saber que requerían, cuales eran los desafíos, por que un expatriado para esa función y que ofrecían a cambio.

Recuerdo que en el avión a Paris me preparé muy bien para la entrevista, repasando mis skills en manejo de plantas y mis experiencias en distintas compañías.

En París me recibieron y me trataron muy bien desde el primer momento y desde ese primer momento también fue mi sorpresa. A la compañía le basto ver mi currículum y corroborar el mismo mediante algunos llamados telefónicos para saber que “técnicamente” era el candidato. Lo que a la compania le preocupaba sobre manera es algo que llaman “CULTURAL SHOCK”. Traducido, significa como uno y la correspondiente familia se va a adaptar a la compania en la que va a empezar, al país al que va, al continente, a la cultura y las costumbres del lugar.

Considerando que esta era mi primera experiencia afuera del país, que era nuevo en la compañía, que jamás había pisado siquiera Asia, que en “La República Islámica de Pakistán” el 98% son musulmanes, entendí enseguida porque el foco de las preguntas estaban en determinar como era yo como persona, como era mi familia y como íbamos a enfrentar este GIANT CHANGE según el director de HR.

Me comentaron la cantidad de fracasos que habían tenido ya que anteriores candidatos no pudieron adaptarse a distintas costumbres, usos, culturas. Por la falta de adaptación, ya sea de la familia o de la persona, dichos proyectos tuvieron que descartarse.

Mi planteo era que iba a ir solo. La respuesta que recibí es que esos son los casos de mayor fracaso. Me senti abatido y pensaba que no se iba a dar la incorporación, pero en el wrapp up final me comunicaron que estaban gratamente sorprendidos y fue que me comunicarían la decisión.

48 hs mas tarde tenía la respuesta afirmativa para entrar a esta prestigiosa compañía.

Luego de casi un año, evaluó como me describí a mi mismo y que fue lo que gratamentente sorprendió.

1) Me considero una persona “Open Mind”. En el terreno esto se ve fácilmente. No me ofendo por como me hablan, ni por como se dirigen a mi. Soy extremadamente respetuoso de las costumbres, creencias, religiones, usos y costumbres de todos y cada una de las personas de los lugares en los que estoy. Jamás emito juicio, solo digo que las costumbres son distintas, no son mejores ni peores. Este posición sirve para entender el medio ambiente y para relacionarse fluidamente con este.
2) Tengo espíritu aventurero. Esto sirve para disfrutar y deleitarse con lo distinto. Algunas veces conté en la Argentina cotidianeidades que vivo. Muchos se sorprenden. Yo las vivos como algo enriquecedor, que me ayuda a entender no sola a mi sino también a mis hijos, que no hay una sola manera de vivir la vida y la mejor es la que a uno le gusta y le produce placer.

Estas dos simples cosas, sirvieron para que sea muy bien aceptado por los pakistaníes, con los cuales inmediatamente, logre estrecha relación en lo laboral. La gente no es tonta, rápidamente se da cuenta si uno es respetuoso o no, y si lo es, recibe ayuda inmediata.
Vale aclarar que por si solos el pueblo de Pakistán es extremadamente solidario y al saber que yo estaba solo y venía desde tan lejos, el apoyo inmediato e incondicional que recibí es mas que meritorio y gratificante.

Hace poco tuve una reunión en París y me encontré con algunas de las personas que me entrevistaron y recordamos los temores que ellos tenían (basados en anteriores casos) y llegamos a una conclusión:

No hay regla escrita para saber quien puede ser expatriado y quien no, pero si hay fuertes indicadores. Los más importantes son los dos mencionados anteriormente.

Espíritu aventurero para mi es mandatorio (si no, es seguro que uno va a sufrir el traslado) ser Open mind es el segundo (si no, es seguro que los que van a sufrir el traslado son los del país que reciben al expatriado).

Hay dos más para mí muy importantes:

a) Sin lugar a duda es el apoyo incondicional de la familia. Acá también la familia debe vivir esta experiencia como una aventura. Un lugar donde viajar, aprender cosas distintas para darse cuenta que el mundo no es solo Buenos Aires, la Argentina o América sino un sin fin de países tan disímiles entre si que el solo hecho de visitarlos es sumamente enriquecedor.
b) El trabajo debe ser gratificante. A uno le tiene que apasionar lo que hace.

Con estas cuatro cosas, todo se hace fácil, divertido y varios momentos quedaran en la memoria para siempre.

El último comentario que me llegó fue una felicitación por mi rápida adaptación y el apoyo visible que recibo de mi familia. Esto ya me hace candidato a otros destinos tan o mas interesantes que Pakistán.

Y sin duda…allí iremos.


http://www.empleos.clarin.com/nota/394-Ser-un-Expatriado
http://www.losrecursoshumanos.com/contenidos/1893-politicas-de-expatriacion-y-repatriacion-en-multinacionales-vision-de-las-empresas-y-de-las-personas.html

3 comentarios:

Alejandro Caviglia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Anónimo dijo...

Adaptarse no es tan fácil, porque se extrañan muchísimas cosas, pero llegar con el "open mind" garantiza mejor el proceso, pero sobre todo no comparar.

GUILLERMO CEBALLOS SERRA dijo...

Te comento que Darío, después de Pakistán estuvo continuó abriendo mas su mente en Cuba por otros dos años y ahora es de vuelta en Argentina, aunque ahora en otra empresa.
Saludos