Por Luciano Mangini | Founder BenchClub
https://www.bench.club/
Siempre quisimos conocer qué están haciendo
exactamente otras empresas y profesionales en el mercado para que determinadas
cosas les funcionen mejor que a nosotros.
¿Por qué otros tienen muy buenos resultados, pero a
nuestra compañía/área/programa el éxito le resulta esquivo?
¿Cómo podemos aprender de esas otras empresas o
profesionales? ¿Podemos copiar sus buenas prácticas?
Claro que podemos, y ese proceso mediante el cual
recopilamos información y obtenemos nuevas ideas mediante la comparación de
aspectos de nuestra empresa con los líderes o los competidores más fuertes del
mercado, lo denominamos BENCHMARKING.
Según la definición de quien es conocido como el
“Padre del Benchmarking” (David Kearns, ex director general de Xerox), «el
benchmarking es un proceso sistemático y continuo para evaluar los productos,
servicios y procesos de trabajo de las organizaciones reconocidas como las
mejores prácticas, aquellos competidores más duros».
En otras palabras, el benchmarking consiste en tomar
como referencia a los mejores y adaptar sus métodos y sus estrategias, siempre
dentro de la legalidad.
Por supuesto, cuando hablamos de los mejores pueden
ser otras empresas, pero también podríamos hablar de otras gerencias dentro de
nuestra compañía u organización que estén teniendo resultados sobresalientes en
las áreas donde queremos mejorar.
Por eso hablamos de benchmarking INTERNO (comparar
prácticas dentro de nuestra organización), COMPETITIVO (compararnos con
nuestros competidores o líderes del mercado) y FUNCIONAL (cuando nos comparamos
con empresas de diferentes industrias).
Y, si bien hace muchos años que existe el benchmarking
(finales de 1960), la gran diferencia es que ahora casi todos estamos
dispuestos a compartirlas para buscar crear un ecosistema de crecimiento.
Pero ¿cómo vas a compartir tus conocimientos y
experiencias con empresas competidoras? Estás dándole a la competencia
herramientas para que nos ganen mercado /colaboradores /clientes.
Desde luego todos los profesionales que están en
posiciones de decisión comprenden plenamente que compartir información sensible
o secretos industriales NO ES BENCHMARKING. No llegaron a puestos ejecutivos
siendo ingenuos.
Pero hay muchos casos de benchmarking exitosos entre
empresas competidoras sin que implique compartir información sensible.
En julio 2020 Le Pain Quotidien (pastelería francesa
con muchos locales a la calle) hace un acuerdo con Mercado Libre para cederle
parte de los colaboradores que estaban suspendidos por el impacto de la
pandemia de COVID-19 y darles la posibilidad de tener una continuidad laboral.
Arcos Dorados Argentina (McDonald´s) al descubrir esa
experiencia exitosa y analizar que pueden hacerlo también en su compañía, toma contacto
con LPQ y Mercado Libre para replicarlo con sus colaboradores.
Cuando ALSEA (Burger King) toma conocimiento de eso,
hace benchmarking con sus colegas de Arcos Dorados y también logra el mismo
acuerdo con Mercado Libre.
Una situación beneficiosa para las 4 empresas y sus
colaboradores, y un ejemplo de benchmarking entre competidores directos e
indirectos.
Pero hay infinidad de casos de benchmarking entre
empresas no competidoras, que es en donde se logra la mayor tasa de
transferencia de conocimientos, al no haber barreras de competencia que cruzar
y los casos de éxito pueden compartirse abiertamente.
Porque APRENDER en esta nueva época no se limita solo
entender nuestras experiencias como compañía y comprender qué hicimos mal y qué
hicimos bien para replicarlo en la siguiente situación.
Hoy, el aprendizaje es social y colaborativo, tanto en
individuos como en compañías. Aprendemos de otros, y otros aprenden de nuestras
experiencias.
Las fronteras inter compañías se han vuelto muy
flexibles y todas aprenden de todas, de sus errores y aciertos, generando un
crecimiento exponencial en las herramientas que todas tienen ahora a su
disposición para resolver problemas.
Y esto no solo sucede en espacios creados
específicamente para el benchmarking como BenchClub, sino también en cámaras
empresarias, redes sociales, grupos de Whatsapp, universidades, redes de
exalumnos, asociaciones de profesionales y en todos los espacios de intercambio
de experiencias que han surgido en los últimos años.
Sólo hay que tener en cuenta la dos premisas de esta
época: aumentar nuestro Networking y compartir Valor, las claves para el nuevo
aprendizaje.
¿Y tú compañía? ¿Van a seguir encerrados sin compartir
sus experiencias o van a sumarse a la Revolución del Benchmarking?
Desde esta columna intentaremos mostrarte, en cada
edición, los beneficios que tiene la construcción colaborativa desde el
aprendizaje hecho por los demás, tanto dentro de tu empresa como en el mercado,
para lograr resultados mejores y más rápidos.
Publicado en Rocking Talent y en este espacio con
expresa autorización del autor.