Por Guillermo Ceballos Serra
¿Y si pensáramos un poco más donde queremos
estar en el 2030?
Desde los últimos meses del 2020, numerosas
empresas, de muy diferentes industrias, se han ido y se siguen yendo de la
Argentina. Como es obvio, ante la contundencia de los datos, oficialismo y
oposición interpretan los datos de modo de sostener las posiciones políticas
preexistentes al dato. Desde la oposición, se culpa al gobierno por la crisis
económica y en particular, de haber contribuido notablemente con una cuarentena
eterna e ineficaz desde lo sanitario y catastrófica desde lo económico. Desde
el oficialismo, se retruca que las empresas no se van de un país de la noche a
la mañana, que esto era el fruto de la crisis de los cuatro años previos y que,
esencialmente, no impactaban significativamente en la economía ni operaban en
sectores esenciales.
Evidentemente las personas, pueden concordar
totalmente con alguna de las posiciones o parcialmente con ambas. Ahora bien,
independientemente de esas lecturas o interpretaciones, los hechos, aunque se
los maquille o se los niegue, tienen consecuencias concretas sobre los
ciudadanos.
Siempre queda el recurso de objetar las
fuentes…
Si discutimos sobre la pobreza, el empleo o la
inflación, cuestionamos los índices y al encuestador si no convalida nuestra
visión. Cuando cambian los gobiernos, no solo se cambia de vereda, sino que lo
que antes se decía que estaba mal, al pasar a ser oficialismo, invariablemente,
“no está tan mal” o es menospreciado.
Por mi actividad, soy “heavy user” de LinkedIn,
la red profesional por excelencia. Esta red permite obtener datos e información
relevante y efectuar comparaciones muy interesantes y que, por algún misterio
del universo o desconocimiento, hasta hoy no ha sido cuestionado.
Digamos previamente que LinkedIn tenía 675
millones de usuarios mensuales y ganaba dos nuevos miembros cada segundo en
enero de 2020. El 12 % de la población mundial (mayor a 13 años) está en
LinkedIn. 30 millones de empresas usan la red. El 97 % de los marketineros B2B
usan LinkedIn para hacer marketing de contenido. El 89 % de los marketineros
B2B utilizan LinkedIn para generar clientes potenciales. (Fuente Hootsuit).
Los datos que voy a compartir corresponden al
21 de febrero de 2021. Esta red, entre otras cosas, facilita el encuentro entre
quienes demandan y ofrecen empleo. A tal fin, permite segmentar los empleos
ofrecidos en seis categorías de menor a mayor: pasantías, niveles iniciales,
empleados, nivel medio / superior, directores y ejecutivos. La oferta de
empleos para las dos categorías superiores, directores y ejecutivos, mostraba
los siguientes datos:
México: 3.175 ofertas de directores y
ejecutivos, Brasil: 2.816, Chile: 2.581, Colombia: 953 y Argentina: 792
Resultan obvias las diferencias con México y
Brasil que son las primeras economías de América Latina, pero Chile triplica la
oferta laboral de Argentina y Colombia es levemente superior, pero se trata de
un estado con más de medio siglo en guerra interna, lo cual muestra que sus
administraciones han sido bastante más eficientes que las nuestras.
Independientemente del tamaño de las economías,
lo concreto es perdida de relevancia relativa de las organizaciones radicadas
en la Argentina en beneficio de los países mencionados. La pérdida del valor de
la moneda local torna irrisoria la contribución de las compañías radicadas en
el país en el balance de las compañías internacionales. Esta pérdida de
relevancia económica se traduce en una pérdida de relevancia de poder en la
política corporativa de los directorios locales en las empresas
multinacionales. Generando el desplazamiento de los directorios regionales
hacia los lugares donde los negocios son mucho más importantes. Dicho muy
coloquialmente, quizás demasiado: “donde se genera la torta deben estar los
pasteleros”.
Por ello, las posibilidades de acceso a las
posiciones más importantes de las compañías disminuyen notablemente para los
argentinos, sin perjuicio de los talentos individuales que realizan los méritos
suficientes para ser reconocidos por sus organizaciones.
Lo que estamos viendo, no son sólo menos
posiciones, sino también menor relevancia de las posiciones disponibles y
menores salarios en términos de monedas duras, todos estos, constituyen un
conjunto de factores negativos que se transforman en menores posibilidades para
los argentinos.
Desaciertos económicos continuados, carencia de
planes, políticas errantes e inseguridad jurídica, lo posibilitan. No se trata
de empresarios malignos, compatriotas o extranjeros, son las condiciones o
expectativas adversas del lugar donde se desempeña la actividad económica.
Tomemos por ejemplo el Brexit, más allá de los
acuerdos logrados entre la Unión Europea y Gran Bretaña en materia de evitar o
reducir arancelamientos a los productos, hay empresas que se mudan al continente.
Coca-Cola European Partners ha elegido a los Países Bajos como Estado miembro
de origen tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea a los efectos de
la Directiva sobre Transparencia, aunque mantendrá su actividad comercial en el
país.
Otra empresa ha sido Berkeley Energía, quien ha
comunicado que el Estado miembro de origen de la compañía para la negociación
de sus acciones en la Unión Europea pasará a ser España.
Podríamos también analizar la situación de
Cataluña en sus esfuerzos independentistas y el impacto en la economía de la
región y del país en su conjunto. La Cámara de Comercio de Barcelona, presidida
por el separatista Joan Canadell, anunció a fines de diciembre de 2020, que más
6000 empresas se han ido de Cataluña desde 2017.
En nuestro país, Alpargatas constituye un
ejemplo emblemático, fundada en el Argentina en 1883, se expandió a Uruguay y
Brasil, hasta que, en 2013, después de una serie de desprendimientos fue
adquirida por Alpargatas Brasil, su ex subsidiaria, propiedad del grupo Camargo
Correa.
Nuestra empresa más valiosa Mercado Libre,
según lo informado al United States Securities and Exchange Commission Form 10K
para el año fiscal 2019, sus ingresos netos provienen en un 63.9 % de Brasil,
19.9 % de Argentina y 12 % de México, pero su flota de aviones no está basada
en Argentina, como tampoco su fundador.
El capital es sensible por naturaleza a las
turbulencias e incertidumbres y busca inmediatamente protegerse ante lo que se
percibe como peligroso. Obviamente no me refiero a los fondos de capital de
riesgo (buitres / holdouts).
El desarrollo económico y social, surge de una
visión futura atractiva para la mayoría y un plan de ejecución consensuado y
realista. Todo proyecto necesita un plan, no improvisación continua. Una simple
mudanza requiere un plan, considerar en detalle el lugar, los tiempos, el
traslado mismo de bienes y personas, las escuelas y universidades, el trabajo,
los comercios, el ocio, la adaptación…porque creer que el estado no lo
necesita.
En la ciencia de la administración, existen
numerosas metodologías para la implementación de proyectos y gestión del
cambio. Es obvio que el sector privado no es igual público y en general los
privados desconocen el manejo de lo público, pero no es menos cierto que quienes
tienen una trayectoria significativa en el sector público, rara vez, han pasado
por la alternativa de pagar sueldos con su propio patrimonio.
Hay mucho que aprender, pero habría que empezar
por reconocer que las situaciones son como son y actuar en consecuencia y no
intentar que quepan en una ideología, sea del color que sea. A eso se lo llama
dogmatismo, algo peligroso en mundo cada vez más cambiante.
Volviendo al dato de LinkedIn, ¿podemos hacer
algo para que haya más ofertas laborales en Argentina? Individualmente poco, la
discusión política, desde hace mucho tiempo, sobrevalora el corto plazo
brindando parches en vez de soluciones, menospreciando el debate sobre la
visión de futuro y el camino a seguir. Como en los tangos, añoramos el pasado,
que ya pasó, adorando, además, todas las vacas sagradas del pensamiento
político y económico. Sabemos sobradamente, que los remedios que se necesitan
aplicar son garantizar la seguridad jurídica, bajar el gasto público y la
inflación, la presión fiscal, incentivar el trabajo genuino, en particular los
sectores de rápida generación de divisas, simplificar la rotación laboral,
tanto el ingreso como el egreso, etc., etc. tareas ciclópeas, ¿imposibles?,
podría ser, pero imprescindibles para mejorar la percepción de los inversores.
Es improbable que la oferta laboral se
incremente en Argentina en los niveles jerárquicos, pero ¿por qué no,
tecnología mediante, capturar las ofertas de otros países? ¿Por qué no
posicionarse para satisfacer necesidades universales o sectoriales de otras
economías? Generar una suerte de empleo marca argentina para el mundo. ¿Qué
deberíamos estar haciendo ahora para ocurra? Especialmente en materia
educativa, fiscal y tecnológica.
Hoy la tecnología diluye las fronteras, nunca
tan evidente como ahora; acerca las personas, las culturas, neutraliza la
necesidad de desplazamientos, permite el conocimiento inmediato de lo que
ocurre en cualquier país del planeta, facilita el trabajo remoto, (nunca tan
remoto y cercano); posibilita nuevos modelos de contrataciones por las empresas
(full time, part time, outsourcing de diversos tipos, gig workers,
crowdworkers) y la educación de calidad gratuita a distancia. ¿Por qué no?
¿Cómo volvernos individual y colectivamente más competitivos? Tengamos presente
que algunas acciones son estrictamente de responsabilidad personal. Formarnos,
es una responsabilidad esencialmente individual.
Soñemos; demos un paso más ¿y si nuestros hijos se socializaran en un club de Buenos Aires y asistieran virtualmente a una escuela de Montevideo o Madrid, simplemente porque preferimos el modelo o contenidos educativos? ¿Acaso no es técnicamente posible? ¿Creemos acaso que no habrá escuelas en otros países dispuestas a ofrecer un servicio educativo de calidad y una titulación remota? Ya hay universidades donde nadie certifica sus titulaciones y se mantienen solo por su prestigio (Singularity University). ¿Por qué no atreverse a debatirlo? ¿Por qué no debatir el futuro y dejar de vivir anclados en el siglo XX? El mundo actual nos demanda esforzarnos en expandir continuamente nuestras fronteras mentales un poco más allá.
Las migraciones son físicas y virtuales. La
gente elige migrar con el cuerpo o con sus ideas y sentimientos. El siglo XXI
¿será una revalorización del nomadismo?
La esencia del aprendizaje está en el modelo y
la imitación, quizás las conductas apropiadas de algunos inspiren a otros a
revisar sus propios paradigmas.