NOVIEMBRE 2024

domingo, 9 de abril de 2017

APRENDIZAJE “FUTURE FRIENDLY”


Por Guillermo Ceballos Serra

Sin prisa pero sin pausa, la nueva trinidad laica, que constituyen la Innovación, la Tecnología y esencialmente la Imaginación, están recreando el mundo a una velocidad imperceptible para el ojo humano.

Cuando destaco a la Imaginación, lo hago debido a que hoy todo es posible, todo lo que imaginamos es posible, es sólo cuestión de tiempo para que se concrete. Como dice Gerd Leonhard, la ciencia ficción se ha convertido en ciencia de los hechos.

¿Cómo imaginamos los negocios en el futuro cercano? Esta pregunta es importante, porque es eso en lo que vamos invertir nuestros recursos y del acierto de nuestra lectura del futuro dependerá la eficiencia y productividad de nuestras organizaciones y por ende el bienestar de nuestra gente.

Cuando digo recreando el mundo, me refiero no sólo al contexto, me refiero esencialmente al ser humano y a sus relaciones con el prójimo.  Si pensamos que los hombres más poderosos de la tierra tenían en algún momento,  un promedio de vida de 20 años; tomemos por ejemplo al Faraón Tutankamon, que vivió  apenas 18 años (1345 – 1327 AC).  Hoy 3500 años más tarde, el promedio de vida en  un país desarrollado oscila entre los 75 y  80 años, significa que la vida humana se ha extendido en el transcurso de esos años en más de 50 años. ¿Cuánto le falta a la medicina, la genética, la biotecnología en “facilitarnos” llegar a los 100 años? Si duda mucho menos que 3500 años, seguramente menos de veinte.

¿Qué haremos de nuestra vida con una longevidad potencial, pero prácticamente asegurada con buenos sistemas de salud, de un siglo?

Tomando sólo este hilo conductor,  veo que la Universidad de Buenos Aires, tiene en su top 5 de ingresantes por carrera  a medicina en primer lugar con 16976, economía 8450, arquitectura 7554, psicología 6221 y derecho 6214 inscriptos para 2017. Además de medicina, ¿cuántos estudian biotecnología, nanotecnología, inteligencia artificial? ¿Están nuestros futuros estudiantes focalizados adecuadamente? En otras palabras, ¿están nuestros estudiantes preparandose para las ciencias de hoy y del futuro?.

¿Estamos remodelando la educación escolar y universitaria? ¿Podemos continuar con el modelo de estudios enciclopedistas durante los primeros veinticinco años de nuestra vida cuando todo lo que aprendemos se torna obsoleto antes de concluir nuestra carrera universitaria? ¿Estamos educando como debiéramos a nuestros niños y adolescentes en un modelo de aprendizaje “future friendly”?

¿Qué significa un modelo de aprendizaje “future friendly”? Significa que si años atrás hablábamos de capacitación continua, hoy no sólo hay que capacitarse sino adicionalmente, contar con una gimnasia  de cuestionamiento, curiosidad e indagación continua. Hace falta una actitud de observación 360°, donde seamos entrenados para estar atentos y preparados para relacionar las novedades emergentes de todos los campos e industrias con su potencial impacto en nuestros negocios. Nuestras organizaciones necesitan educar y contratar gente más capaz de cuestionarse, gente capaz de hacer preguntas, aunque sean incómodas o políticamente incorrectas. De hecho, cuanto más incorrectas mejor aún.

Necesitamos gente que no se conforme con respuestas automáticas, es decir, con aquellas respuestas universalmente aceptadas. Estas nos responderán sobre el pasado, jamás sobre el futuro.
Necesitamos gente que sea capaz de estar en minoría, que no tema cuestionar las verdades comúnmente aceptadas y sea capaz de diseñar su propio itinerario e improvisar en los momentos que haga falta.

El aprendizaje “future friendly” que requiere la era digital,  no es un cronograma  de conocimientos sobre hitos o hechos futuros previsibles o imprevisibles, se trata de una mentalidad abierta a desafiar nuestras creencias más profundas.

No sabemos como será el futuro, pero estoy seguro que será una etapa apasionante. 

¿Estamos listos?

2 comentarios:

Unknown dijo...

Estimado Guillermo, no uso este espacio para comentar el articulo sino para felicitarte por estos nueve años "en línea" apoyando la gestión de los colegas con tus publicaciones.
Un fuerte abrazo.
Alejandro Caviglia

Jorge B. Mosqueira dijo...

Coincido. Nuestras metodologías de aprendizaje atrasan, por lo menos, un par de siglos. Hoy se discuten horas de clase y remuneraciones, lo que es básico, elemental ("los factores de no insatisfacción", como diría Hertzbeg), dejando postergado lo fundamental: cómo se construye el aprendizaje