FEBRERO 2024

jueves, 27 de abril de 2023

Why Middle Management is the Hardest Job | Por qué los mandos intermedios son el trabajo más difícil Simon Sinek


El equipo de mando intermedio está atrapado entre el pensamiento estratégico y el táctico: son el traductor entre los dos. Las cosas se rompen cuando no capacitamos a las personas sobre cómo liderar o el enfoque del liderazgo senior no está alineado con las personas debajo de ellos.

TALENTO LÍQUIDO: LAS HABILIDADES QUE SUMAN EN UN PERFIL CADA VEZ MÁS VERSÁTIL

 


Por Mauro Lestrange, Fundador & CEO de High Flow Consulting

Los talentos líquidos son los que tienen, entre sus principales características, habilidades de versatilidad, conocimientos amplios en diferentes temas y gran nivel de empatía, que permiten trabajar de forma colaborativa entre diferentes equipos de proyectos o áreas.

Es decir, el concepto de talento líquido se refiere a la capacidad de una persona para adaptarse y aprender rápidamente en un entorno cambiante y dinámico.

Se trata de un concepto crucial en el ámbito corporativo, ya que las organizaciones deben ser cada vez más ágiles y estar en constante evolución para mantenerse competitivas.

¿Qué es el talento líquido?

Cuando se habla de talento líquido, hacemos referencia principalmente a 3 competencias:

  • la adaptabilidad,
  • el aprendizaje continuo
  • la mentalidad de crecimiento.

Podemos citar a Carol Dweck y su Libro Growth Mindset: "Se refiere a la creencia de que las habilidades y capacidades de una persona pueden desarrollarse y mejorar a través del esfuerzo, la persistencia y el aprendizaje continuo. Se opone a la 'mentalidad fija', que sugiere que las habilidades son innatas y no se pueden cambiar significativamente."

Las personas con talento líquido son capaces de adaptarse a nuevas situaciones, aprender velozmente y esto, les permite desarrollarse de manera exitosa en nuevos roles y contextos.

¿Cómo promover el talento líquido?

Para desarrollar el talento líquido, es importante fomentar la curiosidad, la creatividad, la colaboración y proporcionar oportunidades de aprendizaje y desarrollo continuo.

También es importante promover una cultura organizacional que apoye la adaptabilidad y la innovación.

Desde el lado del colaborador, éste no tiene que esperar que le llegué. El concepto de "líquido" hace referencia al agua: fluye, se adapta a distintas superficies y llega a ciertos lugares donde otros elementos no pueden alcanzar.

Este concepto fue planteado por el sociólogo polaco Zygmunt Bauman para referirse a la búsqueda de la identidad personal en un mundo cambiante. Según su planteo, "en la modernidad líquida el único valor que sirve como referente es la necesidad de hacerse con una identidad flexible y versátil, que haga frente a las distintas mutaciones que el sujeto ha de enfrentar a lo largo de su vida."

Este estado de "flow" es ese instante en que se alcanza un estado mental de inmersión completa, una concentración en una actividad que es intrínsecamente satisfactoria y gratificante.

El formato de trabajo híbrido y especialmente compañías con una cultura de trabajo digital, demanda potenciar sistemas de organización flexibles.

En la sociedad líquida, las empresas pueden y deben adaptar las tareas, objetivos estratégicos y recursos humanos a las necesidades concretas de los proyectos de cada momento. Así, los colaboradores ganan en libertad y autonomía. Son mucho más flexibles, y desempeñan un papel activo fluyendo entre distintos roles.

Otros de los desafíos que nos enfrentamos en la actualidad. Continuamos viendo como ciertas compañías tradicionales, continúan empeñándose en seguir contratando perfiles estáticos enfocados únicamente en "hard skills" y esto claramente no es recomendable.

Los talentos de hoy seguramente queden obsoletos y deben reconvertirse. Así que no se trata solo de reconocer los beneficios del talento líquido, sino de asumir que la digitalización, la movilidad y la readaptación constante, son los ejes del actual mercado laboral.

¿Qué pueden hacer las empresas?

Desde el área de "People" es necesario que las compañías impulsen una estrategia que les permita atraer y desarrollar el talento líquido. Empezando por aggiornar sus modelos de jornada laboral, aceptando que la forma de trabajo estática, con 100% presencialidad y desarrollo de la carrera profesional en la misma empresa durante toda la vida, está quedando obsoleta.

Por otro lado, enfocándose en el bienestar de los colaboradores. Es importante evitar el estrés laboral que termina generando incertidumbre en la compañía.

Es importante poder comunicar que el talento líquido es adaptativo, sabiendo que, ante un cambio de estructura o estrategia, los colaboradores tienen que tener la posibilidad de plantear una movilidad interna, recibiendo una formación continua que les puede permitir desempeñar otros tipo de tareas o roles.

Otro tema fundamental es reinventar la experiencia del colaborador dentro de las organizaciones. Generando espacios de conexión, escucha, contención y orientación para fortalecer el vínculo y compromiso con el propósito en el nuevo entorno de trabajo.

El nuevo talento líquido, que lidera el cambio, ansía experiencias en distintas áreas, países, culturas y personas. Se siente atraído por nuevas oportunidades que le permitan desplegar lo mejor de sí, siendo el aprendizaje un modo de vida en términos profesionales y personales.

Esta variedad de aprendizajes aporta a la gestión del cambio organizacional derribando silos, barreras culturales, paradigmas e impulsando la innovación a partir de la esencia misma del cambio: la persona.

Como lo acabamos de evidenciar, los talentos líquidos son colaboradores claves dentro de las organizaciones, y es necesario que se sientan cómodos para desarrollar su mejor versión.

 

 Publicado en Infobae y en este espacio con expresa autorización del autor

martes, 25 de abril de 2023

DE LA COCINA A LOS NEGOCIOS. LAS LECCIONES DE ELBULLI PARA EL MUNDO CORPORATIVO

Por Andrés Hatum, Profesor de Management y Organización de la Universidad Torcuato Di Tella

El consagrado cocinero asegura que la creatividad en cualquier campo exige de reglas, métodos y una mirada diferente.

“El auditor creativo no existe en las organizaciones porque las empresas no quieren ver que han creado o innovado poco. Es una herramienta que pocas empresas van a querer implementar”. Ferran Adrià, el chef y dueño del restaurante elBulli que marcó generaciones de cocineros y que cambió la gastronomía mundial, es radical y directo cuando habla de lo que más le gusta: la creatividad.

Invitado por Bodegas Zucardi, Adrià, que es también embajador de Telefónica, estuvo en el país para dar una serie de conferencias en Buenos Aires y Mendoza. El foco fue la creatividad e innovación aplicada a las organizaciones. Luego que el emblemático restaurante cerrara sus puertas en 2011, Ferran se dedicó a profundizar el trabajo creativo que se había iniciado en su negocio y continúa hasta hoy en la fundación elBulli. Por un lado, el Bulli1846, un ecosistema de reflexión en torno a la creación y la innovación; también LABulligrafía, un archivo-museo de elBulli y, finalmente; la creación de una metodología creativa que se puede aplicar en las organizaciones que Adrià bautizó como sapiens.

¿Por qué una organización puede adquirir fama mundial? Esta respuesta puede ser fácil dependiendo la empresa de la que se trate. Grandes empresas, con una gran facturación e impacto directo en la economía de un país (o varios) obtienen mucha prensa. Sin embargo, al ver la difusión que ha tenido elBulli, las explicaciones comienzan a ser más difíciles, sobre todo que la fama de este restaurant enclavado en Cala Monjoi lejos de todo y de todos, se ha consolidado por ser una organización donde la creatividad es la clave de una nueva Cocina de Vanguardia que se difunde por todo el mundo.

Público selecto

A elBulli no solo era difícil acceder por el lugar donde estaba ubicado. El restaurante tenía dos millones de pedidos de reservas anuales, pero solamente 8000 personas por año podían cenar allí. El fenómeno de elBulli y su chef, Ferran Adrià llamó la atención de los expertos y los medios de comunicación. Tal es así que en 2003 fue tapa de The New York Times Magazine con un título muy sutil pero que desbancaba a los franceses del podio mundial de la cocina: The Nueva Nouvelle Cuisine. ¿Cómo hacían en este lugar para generar creatividad extrema? ¿Qué tipo de organización habían conformado?

“ElBulli era un restaurante y una galaxia de negocios alrededor que nos daba libertad creativa”, aclara Ferran para explicar la importancia de la libertad para crear y el dinero para lograr esa libertad de creación.

Ferran dejó en claro la importancia de la profundidad del conocimiento para poder crear: “Me pregunto el porqué de las cosas”. Pregunta tras pregunta, Adrià desafía a sus interlocutores para hacerles ver la importancia de la especialización, el estudio y la profundidad para poder crear. La creatividad no viene de la nada, viene de ser experto en algo.

Alguna de las características organizacionales de elBulli pueden dar una idea de cómo Adrià gestionaba la organización creativa. Primero, el foco de elBulli era la exploración permanente por sobre lo ya existente. Esto se asemeja más al foco de un laboratorio de innovación que a una empresa que trata de explotar un producto existente todo lo que se pueda. Segundo, elBulli trabaja con una base cognitiva amplia y diversa. En muchas organizaciones existe un debate sobre las ventajas o desventajas de tener un equipo directivo diverso donde se mezclen diferentes backgrounds y experiencias. El miedo de muchas empresas es cómo combinar la necesidad de esa heterogeneidad de ideas, visiones y prácticas con la generosidad de compartir evitando conflictos que destruyan el equipo directivo. 

En elBulli preferían pasar por la situación de generar el equilibrio entre estas fuerzas centrípetas, pero aprovechar todo lo que la diversidad de ideas otorga al negocio. Finalmente, en elBulli se miraba lo que sucedía afuera de la industria y el benchmark no se realizaba en el sector sino con otros actores del mercado. La relación de Adrià con el mundo de la ciencia, el diseño, el arte, por ejemplo, impactaban tanto en su cocina como en la reflexión del producto. De mirar a otros en otras disciplinas se ganaba en creatividad.

Métodos y reglas

Para Adrià la creatividad requiere método y ciertas reglas. “Hoy, hasta los pintores, los creativos más radicales, los artistas requieren método. Ser creativo hoy es mucho más difícil que hace diez años.” Para él la creatividad se puede medir: “Además se requiere una auditoría creativa que la mayoría de las empresas no tienen y así se gastan millones de euros en I+D que nadie controla. La auditoría es clave”.

¿Cómo se genera la creatividad? ¿Es una inspiración que viene de la nada? Definitivamente, no. Al analizar el proceso de crear diferentes platos, Adrià encontraba tres fuentes de inspiración.

  • Primero, la adaptación de platos ya conocidos, en general tradicionales, con una mirada diferente: “nuestra personalidad entraba en platos que ya conocíamos”.
  • Segundo, la inspiración a partir de algo que podía ser desde un elemento de la naturaleza hasta un mosaico de Gaudí.
  • Tercero, la asociación. En este caso se asocia algún elemento base como vinagretas, mayonesas, crustáceos, entre otras.

Como si se tratara de jugar con notas post-it, forraban en la pared todos estos elementos nucleares en forma sistematizada. Luego elegían aleatoriamente combinaciones que podían dar platos como “almejas con una vinagreta de mostaza y rábanos picantes… Como si fuese un genoma culinario”.

Finalmente, Adrià focaliza su atención en el talento. “Todo el mundo puede crear” enfatiza Adrià. Ahora bien, el talento creativo, es otra cosa para él. “El talento es la capacidad extraordinaria para hacer algo. Si tengo mucho talento creativo, podré crear más cosas”. ¿Se puede medir la creación? “Es tal vez la tarea más difícil de hacer porque hay diferentes niveles para crear”. ¿Y la innovación? “Innovar es la acción de introducir un cambio creativo en una organización. Pero para que sea innovación, tiene que tener éxito en el mercado”.

 

Publicado en La Nación el 22 de abril de 2023

lunes, 24 de abril de 2023

ASÍ ABRUMAN LOS DATOS A LOS DIRECTIVOS QUE BASAN SUS DECISIONES EN ELLOS

 


Por Raquel Diaz Guijarro, Jefa de Empresas en Cinco Días. Diario Económico del Grupo Prisa (España). Especializada en economía (inmobiliario e infraestructuras). Licenciada en Periodismo - Universidad Complutense.

Un estudio de Oracle concluye que hasta un 45% de los jefes en España preferiría que la Inteligencia Artificial eligiera en su lugar.

Términos como big data, micro datos o Inteligencia Artificial son ya parte de la rutina profesional y personal de cada vez más colectivos. Los líderes empresariales desean apoyarse en los datos, y saben que estos son fundamentales para el éxito de sus organizaciones. El problema es que cada vez con mayor frecuencia creen que no cuentan con todas las herramientas necesarias para lograrlo, lo que está erosionando su confianza y capacidad para tomar las decisiones.

Por primera vez, el estudio The Decision Dilemma, elaborado por Oracle y Seth Stephens-Davidowitz, colaborador de éxito del New York Times ha analizado hasta qué punto las personas se sienten abrumadas y poco cualificadas para utilizar datos a la hora de tomar decisiones, y eso está perjudicando su calidad de vida y su rendimiento empresarial.

En ese análisis, han participado más de 14.000 empleados y líderes empresariales de 17 países, incluido España. Entre las conclusiones que arroja destaca cómo el 73% de los españoles señala que el número de decisiones que toma cada día se ha multiplicado por 10 en los últimos tres años y, cuando tratan de adoptar una decisión, el 85% se ve bombardeado por más datos de fuentes más distintas que nunca. De ahí que ante tal bombardeo de información, el 59% admita que más de una vez al día no saben qué decisión tomar. En el caso de quienes tienen responsabilidades profesionales por dirigir equipos, la situación es aún más límite, ya que de las decisiones que finalmente adopten dependerá en gran medida el devenir de su organización.

Otra de las conclusiones que sostiene el estudio es la falta de confianza que generan muchos de esos datos. Hasta cuatro de cada diez españoles tiene dudas sobre las cifras o fuentes en los que puede confiar, y esa situación llega a propiciar que el 65% haya renunciado a tomar alguna decisión debido a la abrumadora cantidad de datos. Se trata de una situación indeseable para la inmensa mayoría de los consultados, ya que el 81% de los españoles indica que esta incapacidad para tomar decisiones tiene un impacto negativo en su calidad de vida: causa picos de ansiedad (43%), pérdida de oportunidades (25%) y conlleva gastos innecesarios (19%). Tal es la inseguridad que puede llegar a producir esta avalancha de datos, que el 45% de los jefes españoles que han participado en la macro encuesta admite que preferirían que la Inteligencia Artificial decidiera por ellos.

Puesto que el avance de los datos es imparable, ya que el 94% de los encuestados dice haber cambiado su forma de tomar decisiones en los últimos tres años, un cambio que ya ha detectado Oracle en su estudio es comprobar cómo el 39% ahora solo consulta fuentes en las que confía, y el 26% reconoce guiarse únicamente por su intuición. Y es que el consenso incide en que los datos deben ayudar en el proceso de toma de decisiones o dejarán de tenerse en cuenta.

Insiste el estudio en que esta situación de ansiedad y estrés ante el aluvión de datos es particularmente patente en la esfera empresarial. El 81% de los líderes empresariales en España advierte que también está pasando que las personas a menudo toman primero una decisión y solo buscan los datos para justificarla a continuación. Además, en este contexto y según el 71% de los empleados, las organizaciones con frecuencia dan prioridad a la opinión de la persona de más alta remuneración por encima de los datos, y hasta un 24% siente que la mayoría de las decisiones tomadas en su empresa son irracionales.

A pesar de la frustración que les plantean los datos en los ámbitos personal y profesional, los españoles saben que, sin datos, sus decisiones serían menos precisas (47%), menos acertadas (20%) y estarían más sujetas a errores (39%).

Los españoles también consideran que una organización que recurre a la tecnología para tomar decisiones basadas en datos es más fiable (84%) y tendrá más éxito (84%). Además, es más probable que inviertan en ella (82%), colaboren con ella (83%) y trabajen para ella (84%).


Publicado en Cinco Días - El País el 19 de abril de 2023.